jueves, 13 de septiembre de 2007

Cartas...al Defensor del Oyente AndalúJulio2005

NO QUEREMOS NI HABLAR, NI ESCRIBIR EN CASTELLANO

QUEREMO HASERLO EN ANDALU ¿pasa argo?

Señor Defensor del Oyente del “asento andalú” y del Vidente también “andalú”, aunque estos hayan venido de cualquier parte del mundo y que desgraciadamente ve R.T.V.A.

No conocemos su nombre, ni tampoco de momento nos importa absolutamente nada.

No es nuevo, ni muchísimo menos, nuestro deseo de poner en conocimiento de su augusta y profesional persona (porque imaginamos y si nos equivocamos rectifíquenos, recibiendo a la vez nuestra petición de disculpas), que su amor al servicio de los andaluses no estará reñido con los emolumentos que debe de recibir por sentarse en su confortable sillón de defensor de las orejas y ojos de los andaluses.

Si me he decidido a enviarle esta Carta Nasionalista Andalusa ha sido por la sugerencia de un compañero malagueño del Partido Andalucista, que estando hasta los gemelos colgantes de la entrepierna por la política seguida por el Partido y las cosas que han ocurrido en Andalusía con su colaboración, ha solicitado-ordenado su baja del mismo y nos ha sugerido que le expresemos nuestra opinión sobre su “extraordinaria gestión” sentado en su muy bien remunerado y mullido sillón.

En su condición de Defensor debe usted de tener un profundo conocimiento de las distintas leyes y reglamentaciones que pudieren afectar a los ciudadanos que usted tiene el deber de proteger, siendo de obligado cumplimiento su intervención de oficio, si el tema atenta contra los derechos de los “probes andaluses” que tienen la desgracia de sentirse ciudadanos de inferior categoría al observar como se habla en las distintas comarcas de esta bendita tierra andalusa, y lo “finolis” que son los bustos parlantes que les hablan desde las pantallas de su ¿vigilada? T.V. y que al oírlos, deben pensar espantados que les hablan desde Madrid y no desde San Juan de Aznalfarache y sucursales.

Como le decía en el párrafo anterior, en su privilegiada condición de Defensor debe de estar usted al corriente de las distintas leyes que protegen los derechos de los andaluses, entre los que se encuentra una que hace referencia al irrenunciable derecho a la modalidad de habla andalusa, bien sea de cualquier comarca almeriense, jiennense, granaína, malagueña, cordobesa, onubense, sevillana o gaditana.

No deberíamos recordarle, porque su obligación es conocer, lo que dice el Estatuto de autonomía (en el que pronto entraremos para su reforma), en sus artículos 12.3.2, así como lo reflejado en el artículo 3.3 de la Constitución Española, textos legales estos que fueron sometidos a la voluntad popular, tanto andalusa, como española y que fueron aprobados por decisión abrumadoramente mayoritaria de los mismos para su escrupuloso cumplimiento y no para que usted se los pase por el forro de sus funcionariales cojones.

Los cacatúo/as que diariamente y desde las pantallas televisivas que tiene usted por mandato legal obligación de vigilar para defender nuestros derechos, se dedican a intentar demostrarnos que los andaluses somos una manada de “arnafavetos” e “isnorantes” y que para nuestra desgracia no sabemos hablar con el asento de los bárbaros del norte de Despeñaperros, asento castellano este, que nos ha salvado de la barbarie árabe y musulmana, que dicho sea de paso hizo de Andalusía la capital de la cultura…, joé para que seguir por aquí, si usted ha demostrado ser convenientemente lacayo a los intereses léxicos centralistas.

A nosotros nos da exactamente igual si el andalú que se habla es de Graná y con su asento dice “la polla”; nos da igual si es Córdoba y dice “sais”, en lugar de seis; nos da igual si con el embriagante asento malagueño dice “que quiere, que me pegue un tiro con lo que duele”; nos da igual si habla con asento trianero; nos vuelve loco si habla con la grasia y el arte del asento de Cai, porque todos, absolutamente todos hablan con el bendito asento de mi tierra andalusa, que hace que allá donde quiere que fuere que estuvieren, al abrir la boca se oye comentar: usted por su forma de hablar debe de ser andaluz. Zi zeñora, zoy andalú por la Grazia de Dio.

Si por hipócrita respeto al resto de Andalusía en televisión no se habla con un determinado asento de una determinada comarca, no importa, contemplemos satisfechos que cuando los comarcales hablen, lo hagan como saben, que sea como sea, es asento andalú y por lo tanto adorable.

Señor defensor de los derechos de los andaluses de nacimiento, o de los otros que sin haber nacido aquí también vean televisión, cumpla con sus obligaciones que no son otras que: primero los andaluses y su forma de hablar, segundo los andaluses y su forma de hablar, tercero los andaluses y su forma de hablar, después los andaluses y su forma de hablar y para terminar los andaluses y su forma de hablar. Cumpla con su sagrada obligación, que “pa” eso cobra.

Paco Fuentes Sierra.
Primer Secretario del Partido Andalucista. Baleares.